Vencejo
Andino
(aeronautes andecolus)

De 15cm,
alas largas en forma de sable y de color plomo claro
con collar y lomoblancos.
Anida en la serranía y por temporadas iregulares se
acerca a la costa donde vuela siempre en bandadas
revoloteando para buscar insectos.
Su llamado es un trino corto característico.
Es mas bien visible en las zonas rurales.
Su habitat abarca desde los andes del Perú hasta
Bolivia, Argentina y Chile.
El vencejo es un ave apodiforme de la
familia de los apódidos, especialmente adaptada para
el vuelo, con alas falciformes, cola corta de
horquilla poco profunda, boca muy ancha y grande
rematada con un pico pequeño, plumaje negruzco con
una pequeña porción blanca o gris bajo el pico,
patas muy cortas y garras diminutas pero de presa
extraordinariamente fuerte que le permiten asirse a
sitios elevados ya que si cae al suelo experimenta
gran dificultad en remontar el vuelo.
Los vencejos pasan la mayor parte de su
vida en el aire; comen, duermen y copulan volando.
Únicamente se posan para poner los huevos,
incubarlos y criar a sus polluelos. Permanecen en
vuelo ininterrumpido durante nueve meses del año.
Las crías abandonan el nido por la mañana volando
súbitamente, sin necesidad de aprendizaje previo, y
no retornan a él jamás. De noche, estas aves se
elevan hasta los 2.000 m de altura y allí duermen,
volando. Durante su sueño el aleteo se reduce de los
habituales 10 movimientos por segundo a tan sólo 7.
Debido a sus extraños hábitos aéreos aún se
desconocen muchísimas cosas de la vida de estas
aves.
Es un ave migratoria que llega en
verano. En el campo, anida gregariamente en taludes
pero está especialmente adaptado a los asentamientos
humanos. Forma sus nidos bajo cornisas y aleros de
edificios y casas. Suele ser fiel a su lugar de
anidamiento; vuelve a él y lo reconstruyen cuando
hace falta.
El vencejo común se alimenta de
minúsculos insectos voladores (plancton aéreo) que
atrapa con su amplio pico que mantiene constantemente
abierto al volar. También recoge al vuelo los
materiales con los que construye el nido. En cuanto a
su reproducción, son de hábito monogámico y
presentan un solo periodo de reproducción al año,
en las áreas de migración estival. Los juveniles
abandonan el nido volando y de manera definitiva. La
madurez reproductiva es alcanzada a los dos años de
edad.
Los jóvenes vencejos abandonan el nido
con un ligero sobrepeso de 6-7 gramos con respecto a
los adultos. Esta reserva les permite afrontar las
primeras dificultades de la vida aérea puesto que el
abandono del nido es definitivo.
El desarrollo de los juveniles en el
nido está relacionado en gran medida con la
temperatura ambiente. La entrada de frentes fríos o
de mal tiempo en las áreas de nidificación
disminuye considerablemente la oferta de plancton
aéreo. Esto conlleva a un alejamiento temporal de
los vencejos hacia zonas de mayor oferta o
específicamente a los bordes de la zona de baja
presión. Este movimiento evasivo se da sobretodo en
los individuos de un año que por no estar en
nidificación, no están ligados a un emplazamiento
fijo, pero incluye también individuos en nidación
(estos movimientos pueden ser de cientos de
kilómetros). Los juveniles nidícolas en condiciones
normales pueden sobrevirir a la ausencia de lospadres
durante cuatro días o más entrando en un letargo
que reduce el ritmo cardiaco de 90 a 20 latidos por
minuto y la temperatura corporal corporal de 36-39°C
a cerca de 20°C.
Los vencejos emiten un grito muy agudo
que en algunos países les ha valido el apelativo de
pájaro del diablo.
En Lima los hemos visto en Cieneguilla y
en Surco (en la zona de Las Casuarinas).