| Mis Aventuras como EspíaPor Lord Baden-Powell de Gilwell
 Capítulo VIII EXPLORANDO UN ASTILLERO EXTRANJERO 
               El
            conocer este hecho fue útil en uno de mis viajes de
            investigación. Dentro de un gran muro alto hay un
            astillero en el cual, se rumoraba, había sido
            erigida una nueva central eléctrica y posiblemente
            una dársena seca estaba en preparación.Era temprano en la mañana; las
            puertas acababan de ser abiertas, los trabajadores
            comenzaban a llegar y muchos carros de materiales
            esperaban para entrar. Calculando la oportunidad de
            que las puertas fueran abiertas, di un vistazo
            rápido, como cualquier caminante ordinario lo
            liaría. Fui inmediatamente arrojado por el policía
            en servicio en la garita.
 No fui muy lejos, Mi intención
            era entrar de alguna manera y ver lo que pudiera.
            Observé al primero de los carros entrar y noté que
            el policía estaba atareado hablando con el vagonero
            en jefe, mientras el segundo empezaba a pasar a
            través de la puerta. En un momento salté al lado de
            él en el lado opuesto al portero, y pasé adentro y
            continué caminando con el vehículo que dobló a la
            derecha y giró alrededor del nuevo edificio en
            construcción. Entonces noté a otro policía
            enfrente de mí por lo que conservé mi posición al
            lado del carro readaptando su tapa para así
            evitarlo.
 Desafortunadamente, al rodear la
            esquina era espiado por el primer policía que
            inmediatamente comenzó a gritarme (ver mapa). Yo
            estaba sordo a sus reparos y caminé tan
            despreocupadamente como un culpable hasta que
            encontré la esquina del nuevo edificio entre él y
            yo. Entonces yo, honestamente, me enganché a lo
            largo de la parte posterior del edificio y rodeé la
            esquina lejana de él.
 La línea punteada en
                            este plano muestra mi ruta. Las
                            figuras pequeñas son los policías
                            buscándome.
    Tan
            pronto lo hice, vi por el rabillo de mi ojo que él
            venía corriendo tras de mí y llamaba al segundo
            policía en su ayuda. Me lancé como un animal
            alrededor de la siguiente esquina fuera de la vista
            de ambos policías y busqué algún método de
            escape.El andamio de la casa nueva apilado
            sobre mí, tenía una escalera sobrepuesta. Actué
            como un faro, aguzando un ojo en la esquina del
            edificio para no ser seguido, Estaba a medio camino
            arriba cuando doblando la esquina salió uno de los
            policías. De inmediato me "congelé".
            Estaba como a 15 pies sobre el nivel del mar y a no
            menos de 20 yardas de él. Él, indeciso, con sus
            piernas separadas, miraba atentamente de lado a lado
            en todas direcciones para ver dónde había ido, muy
            ansioso y cambiándose de un lugar a otro. Yo estaba
            igualmente ansioso pero inmóvil.
 Luego se acercó a la escalera y,
            extrañamente, me sentí más seguro cuando estuvo
            debajo de mí y casi me pasó por debajo, viendo
            atentamente a los corredores de las puertas del
            inacabado edificio. Entonces dubitativamente volteó
            y miró hacia una nave detrás de él, pensando que
            pude haber ido ahí; finalmente se alejó corriendo
            hacia la siguiente esquina del edificio. Al momento
            que desapareció terminé de subir la escalera para
            llegar con seguridad a la plataforma del andamiaje.
            Los trabajadores todavía no entraban al edificio,
            así que tuve todo el lugar para mí solo. Lo primero
            que hice fue buscar otra escalera como una línea de
            escape en caso de ser perseguido. Siempre es bueno
            tener una puerta trasera en tu escondite, ése es uno
            de los datos esenciales en la exploración.
 Después
            encontré una pequeña escalera que llevaba de mi
            plataforma hacia el tramo inferior, pero no llegaba
            al suelo. Mirando silenciosamente sobre el andamiaje,
            vi abajo a mi amigo el policía buscando por el lado
            equivocado. Di gracias a mi buena estrella de que él
            no fuera un rastreador, y de ese modo no haya visto
            mis pisadas guiando hacia la escalera. Entonces
            procedí a tomar nota de los alrededores y reunir la
            información. Juzgando por el diseño del edificio,
            sus grandes chimeneas, etc., me encontraba en la
            nueva central eléctrica. Desde m¡ lugar tenía una
            excelente vista del astillero, a menos de 100 pies de
            donde estaba se encontraban los trabajos de
            excavación del nuevo muelle, cuyas dimensiones pude
            fácilmente estimar. Saqué m¡ brújula-prismático
            y rápidamente tomé las marcaciones de dos puntos
            conspicuos en los montes vecinos y así determiné la
            posición que podría ser marcada en un mapa a gran
            escala para propósitos de bombardear el lugar, si
            así se deseara.Mientras tanto, mi perseguidor se
            había reunido con el otro policía; ellos estaban en
            cerrada confabulación justo debajo de mi, donde pude
            observarlos a través de una grieta entre dos de las
            tablas del suelo. Ellos evidentemente habían llegado
            a la conclusión que no estaba en la central
            eléctrica ya que el interior estaba totalmente
            abierto a la vista y ellos habían hecho una buena
            inspección dentro de ella. Su siguiente paso fue
            examinar los artículos de la nave cercarla, que
            estaba evidentemente lleno de maderos para
            construcciones, etc.
 Un policía entró mientras que el
            otro permaneció afuera en la línea que yo
            probablemente tomaría para escapar, esto es, entre
            la nave y el muro que lleva a la entrada. Por
            accidente, más que por premeditación, quedó cerca
            del pie de mi escalera cortando así mi retirada en
            esa dirección. Mientras ellos estuvieron así
            ocupados dejaron la puerta indefensa, pensé que era
            una oportunidad demasiado buena para perderla, así
            que, regresé a lo largo del andamio hasta encontrar
            la pequeña escalera, descendí por ella hasta la
            planta inferior, viendo que no estaba ninguno de los
            policías, rápidamente me deslicé por uno de los
            tubos del andamiaje y aterricé a salvo en el suelo,
            cerca de la gran chimenea del edificio.
 Aquí estaba fuera de vista, aunque
            no lejos del policía que cuidaba la escalera,
            manteniendo la esquina del edificio entre nosotros,
            me alejé por detrás de la caseta del guardia, Y
            entonces me deslicé fuera sin ser visto.
 INTRODUCCIÓN Capítulo I LOS
        DIFERENTES RANGOS DE LOS ESPÍAS
 Capítulo IILOS PLANES DE INVASIÓN ALEMES
 Capítulo IIIJAN GROOTBOOM, MI ESPÍA NATIVO
  Capitulo IVTRANSPORTANDO INFORMACIÓN
 Capítulo VPLANOS SECRETOS DE FORTIFICACIONES
 Capítulo VIICÓMO SE DISFRAZAN LOS ESPIAS
 Capítulo VIIIEXPLORANDO UN ASTILLERO EXTRANJERO
 Capítulo IXESPIANDO A LAS TROPAS ALPINAS
  Capítulo XPOSANDO COMO UN ARTISTA
  Capítulo XIENGAÑANDO A UN CENTINELA ALEMAN
 Capítulo XIIUN ESPIA ES SUSPICAZ
 Capítulo XIIIBURLANDO A UN CENTINELA TURCO
 Capítulo XIVEL TURCO Y EL TÉ
  Capítulo XVOBSERVANDO A LOS BOSNIOS
 Capítulo XVIENCUENTRO CON LA POLICIA
 Capítulo XVIICAPTURADO AL FIN
 Capítulo XVIIIEL ESCAPE
 CONCLUSIÓN |